Blog Oficial de la Porra Fresa

"Una mentada de madre en la calle ofende, pero una mentada de madre dentro de la Arena Puebla hace que el ambiente comience a calentarse y se disfrutan mas las Luchas. 68 Aniversario Arena Puebla"

Buscar este blog

jueves, 25 de julio de 2013

¿La lucha con sangre entra? El CMLL y la violencia explicita.

.
.
Fuente: Cesar/Los Coliseinos

Hace poco vi en Facebook una fotografía de un par de luchadores bañados en sangre y revisando los comentarios vi un par que llamaron mi atención; "ojalá hubiera más luchas así" y "me gustaría ver este tipo de luchas en el CMLL". Los autores de los comentarios viven en un lugares muy distantes de aquel en donde se celebro la función, es decir, no vieron la lucha, no saben si fue buena o mala, simplemente, tal y como sucede a menudo, a partir de una fotografía de "nota roja" prejuzgan que la existencia de un corte implica la existencia de una lucha de alto nivel.

La buena lucha se debe juzgar por los elementos técnicos que presenta, por su sentido del drama, por la inteligencia en su desarrollo, su ritmo y propuesta, no por la cantidad de sangre o el tamaño de una herida.

De verdad no hay diferencia entre el escupitajo de Mr. Niebla, los bailes de Latin Lover y los besos de Máximo con esos luchadores que siempre buscan un corte, no la hay, son recursos baratos, fórmulas probadas que producen un aplauso instantáneo. Escupitajo, bailes, besos y sangre no sirven de nada si no se acompañan de una propuesta en el ring, ojo, una lucha cómica, una buena lucha cómica, puede ser superior a una lucha con dos tipos bañados en sangre ¿lo dudan? vean lucha libre y verán que no solo es posible, sino que pasa con frecuencia. Sangre, bailes, escupitajo, besos, parafernalia, etc., son meros recursos, no son la esencia del espectáculo, son elementos accesorios, y lamentablemente, la sangre, cuando no se justifica ni se acompaña de calidad en el ring, es el más burdo de todos estos recursos, el más tramposo.


No es casualidad que en la mayoría de las listas de "mejor luchador del año" y "mejor lucha del año" que son
publicadas en diversos medios, las mismas se encuentren dominadas por elementos y luchas que usan muy poco, o de plano no usan, a la sangre como elemento recurrente. ¿lo dudan? los invito a revisar las listas nacionales e internacionales y comprobaran lo que les digo.

No tengo nada en contra de los camorreros, los "brawler" como ahora les llaman, tampoco tengo nada en contra de la sangre en si misma. Estoy en contra de los tramposos, de que la sangre se trivialice como recurso, de que la misma se use para disfrazar carencias, que no se justifique su uso, ni se acompañe de una propuesta arriba del ring, que se le regale el título de "verdadero luchador" o "esas luchas si son de a deveras" a tipos que no saben hacer otra cosa que buscar un corte en la frente y pasearse como locos.


Para tocar el tema es inevitable no referirse a L.A. Park, toda vez que Tapia ejemplifica en su persona varios de los recursos de los que hice referencia en lineas anteriores y de las políticas que hablare en posteriores. Tapia antes que ser un "brawler", es un buen luchador, y es por esto último y no por lo primero, que aun y cuando, en tiempos recientes, el definió en buena medida este estilo de luchas con máscaras rotas, sillazos y sangre, también hay que subrayar que tiene un importante historial de luchas que tienen gran calidad, por supuesto que tiene varias luchas que son un completo bodrio, pero ya en varias ocasiones a lo largo de su carrera ha competido en un nivel sobresaliente. Hoy día es muy difícil de imaginar a Tapia en una lucha que no contenga todos estos elementos antes mencionados, pocos recuerdan al hombre que en sus primeros años podía luchar de forma convencional, y luchar bien en ese estilo, aun y cuando ahora al dejarlo de practicar el mismo se sienta extraño y prefiera hacerlo con el que le ha dado fama en la última década.

Tapia es uno de los luchadores más influyentes que permanecen en activo, su estilo de lucha consistente en trabajar entre el público, las máscaras rasgadas, la sangre, el uso de sillas, las palabras altisonantes cuando tiene el uso de la voz y hasta su discurso en contra de las grandes empresas, ayudaron a definir en buena medida al estilo de lucha libre independiente empleado en los últimos tiempos.

El estilo de L.A. Park funciono por dos razones principales; 1.- Es un buen luchador y 2.- El escenario independiente, tan urgido de estrellas, le permitió a Tapia luchar en las condiciones que el quisiera.

Tapia hizo escuela, eso es claro, pero tal y como a menudo sucede con los imitadores, estos últimos, ya sea en su faceta de promotores o luchadores, únicamente han copiado lo superficial, el recurso barato, compran para si un estilo al que no le hacen justicia, solamente recurren a una fórmula probada, pero rara vez la acompañan de calidad, en virtud de que tal y como lo explique al principio de esta nota, un sector del público solo quiere ver la sangre por la sangre y pues hay varios sujetos dispuestos a satisfacer esa sed.

Lo anterior por cuanto hace al estilo en si, lo siguiente por cuanto hace a una pregunta que se hacen los aficionados ¿Se puede replicar este estilo de lucha en la empresa mexicana de lucha libre? imposible, eso no sucederá. He escrito que la leyenda de L.A. Park se pudo escribir en buena medida porque los promotores lo permitieron, el estilo de camorrero lo perfecciono en el escenario independiente, gracias a todas las libertades, y porque no decirlo, libertinaje que permite ese sector.

Hay que ser claros, solo hay dos empresas bien constituidas en México; el CMLL y  Triple A, no hay más, son las dos únicas empresas que continuamente lidian con cuestiones administrativas, económicas, demandas de toda índole, logística, multas, etc. (y en el caso del Consejo con un sindicato)  Experiencias que les han llevado a implementar sus políticas empresariales y la logística que han de seguirse en sus eventos.

Nuevamente Tapia es el ejemplo perfecto para tratas de explicar las dudas y sugerencias de los aficionados. Despues de exitosas campañas independientes, Tapia trabajo sin éxito en el CMLL para después tener un retorno exitoso en Triple A. Mientras Triple A, después de intensas negociaciones, le permitió luchar en su estilo -estilo que dicho sea de paso tiene afinidad con el que se desarrolla en la caravana estelar-,  el CMLL, por su lado, se negó a modificar su política empresarial para satisfacer a un solo luchador ¿el resultado? Luchando en estilo convencional Tapia no pudo replicar su éxito obtenido durante su primera etapa en Triple A, aunque a la fecha él no acepte lo anterior y prefiera justificarse usando el exitoso discurso mediático que reza "no me dejaron luchar, solo quieren proteger a sus estrellas". Discurso que paréntesis aparte no ha perdido eficacia, tal y como hace poco lo demostró El Hijo del Fantasma en su ya famoso berrinche tuitero de junior.

¿Quién actuó bien, quién lo hizo mal? Ambas empresas hicieron lo correcto, fueron congruentes con su ideología y con sus políticas que son de sobra conocidas. Por cuanto hace al CMLL brevemente comentare;

Lucha en gradas: El CMLL por cuestiones de seguridad prohíbe la lucha en las gradas, ellos atienden a un principio básico de seguridad en donde se sugiere no llevar las acciones a aquellos lugares en donde el aparato de seguridad es más vulnerable. ¿Qué hay empresas que si lo permiten? claro, pero ese es su problema, cada quien maneja su seguridad como mejor le parece, por ejemplo, he visto peligrosas fórmulas en donde se les invita a los aficionados a llevar objetos punzocortates y contundentes para "el show extremo" y en donde además, dentro de la arena, se les va a vender alcohol a estos mismos aficionados, una combinación explosiva en términos de seguridad.

El uso de palabras altisonantes. En un autolavado, en una función de barrio, en una arena chica, funciona, y funciona muy bien, es una forma de "prender" a la gente, es algo típico de los independientes y de las grandes empresas cuando se encuentran de gira. Sin embargo, dicha estrategia no funciona cuando estas grabando un programa de televisión,  en este caso un discurso plagado de groserías, es un discurso que tiene que ser censurado y que solo representa un desperdicio de tiempo aire, no es eficaz, representa perdidas.

Objetos prohibidos. Rara vez se autorizan, y cuando lo hacen no se trata de objetos demasiado peligrosos y no se utilizan como soporte de toda una rutina -lo cual no forma parte de la filosofía del CMLL-.

Protección. Por supuesto que existe, y no porque los empresarios tengan un espíritu humanista, pues me podría pasar toda la tarde pensando en alguien con esas características y no lo encontraría. Por protección a elementos se debiera entender mejor "protección al dinero". Desde el punto de vista empresarial los luchadores y sus personajes, son activos de la empresa, y su incapacidad temporal genera perdidas. Todos sabemos que hay carteles que se venden más fácilmente si están presentes ciertos elementos, y en consecuencia, su ausencia representa perdidas. La relación con los independientes es más fácil; "rompete o rompele su madre" o "haz lo que quieras", total te voy a volver a contratar en uno o dos meses, cada quien se lleva su parte del botín y todos contentos. Con las grandes empresas no sucede así, estas tienen que vender y cumplir con compromisos ya adquiridos, necesitan a sus luchadores durante todos los días del año y por ello establecen límites al grado de violencia permitido y sanciones a quienes rompen a los mismos.

Sangre. Vedada, no hay más, salvo casos muy excepcionales o desafortunados accidentes, el CMLL le sugiere a sus luchadores no buscar cortes de manera intencional. En alguna otra ocasión expuse los motivos que llevaron a tomar esta decisión, tales como su "target" y cuestiones judiciales, laborales y sanitarias -en ese orden-.

En conclusión, sugiero no prejuzgar si una lucha es buena o mala a partir de la mera presencia de la sangre, debemos de establecer parámetros muy claros para calificar a una lucha, y en el caso de los que gustan de este estilo les sugiero poner como ejemplo a la trayectoria de L.A. Park , para tener así un buen referente de lo que es un buen luchador actuando como "brawler" y distinguirlo de aquellos que recurren a la trampa para venderse como lo que no son. Participar en una lucha con sangre no te hace mejor luchador, hemos caído en el absurdo de decir cosas como  "El Loco Max de extremo, ¿ya ven?, ahora si va luchar", o peor aún "Loco no esta al nivel de los extremos, aquí si va a ver lo que es luchar de verdad".

No es necesaria la sangre ni los artefactos prohibidos para ver un buen espectáculo, ya sea la lucha área, a ras de lona o incluso cómica, pueden existir buenas luchas, pues las mismas dependen de los elementos a los que hice referencia en los primeros párrafos de este comentario y no de la saturación de los rasgos que definen a uno u otro estilo.

Sobre las dudas o deseos de ver dicho estilo de lucha en el CMLL hay que ser claros, a corto y mediano plazo, no lo verán, la empresa mexicana de lucha libre tiene su propio estilo y sus políticas, sus fundamentos, y es en base a ese estilo y fundamentos que se debe de juzgar a sus luchas como buenas o malas, teniendo como referente al nivel de lucha que la historia nos ha demostrado se puede alcanzar cuando se compite en dichas condiciones.

Fuente: Cesar/Los Coliseinos
.
.

3 comentarios:

  1. Excelente nota!! Saludos

    ResponderEliminar
  2. Va claro ejemplo de que se puede ver sangre y una buena lucha esta la del Santo VS el Espanto lo que pasa en la lucha libre es que a los promotores solo les interesa cuidar su dinero ya que si un luchador estelar se lastima no venden entrada y si de por sí el CMLL no tiene entradas de lleno y maginense que se lastime un luchador por utilizar este tipo de lucha o bien si se muere un luchador en el Ring el empresario se supondría que estaría obligado a pagar una indemnización a su familia por muerte por riesgo de trabajo la cantidad que estaría desembolsando

    ResponderEliminar
  3. Gracias por sus opiniones y es un excelente articulo de Cesar

    ResponderEliminar