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Estamos a días de que se cumplan tres años de que el entonces conocido como Místico, ahora Sin Cara, tuvo su última presentación para el CMLL para irse a trabajar con la WWE. En aquel entonces el anuncio fue sorpresivo, más no lo fueron las intenciones de la empresa gringa hacia el luchador mexicano, quien fue recibido con todos los honores, y no era para menos, estábamos hablando del luchador de la década pasada, de la máxima estrella de la empresa de lucha libre más antigua del mundo. Durante años sus partidarios nos cansamos de exaltar sus virtudes y de rebatir las infundadas criticas hacia su desempeño, hablábamos de una estrella que se encontraba muy por encima de sus compañeros de generación y aunque las criticas absurdas aparecían por doquier, el hecho de que la WWE, la NJPW y el propio CMLL, las tres empresas más importantes en cada capital de la lucha libre, se disputaran sus servicios, nos permitía advertir del tamaño del coloso del que estábamos hablando. El tiempo, como en otras ocasiones, nos dio la razón a quienes siempre le dimos un voto de confianza a "Nacho".
En un contexto de bajas entradas iniciado en el ya lejano 2008, la partida de "Nacho" del CMLL supuso para la empresa la perdida de su máxima estrella y para el luchador representaba no solo la re-afirmación de lograr ser, por segunda ocasión, el luchador de la década sino de ser aclamado por una audiencia mayor, y por supuesto, conseguir los anhelados dolares.
WWE le dio una bienvenida poco usual para un elemento recién llegado a la empresa, le dio un trato de super estrella y un reconocimiento tácito a sus logros conseguidos en México -cosa que muy pocas veces suele hacer la empresa gringa-. La WWE, muy experimentada en esto de crear éxitos, resolvió con un tronar de dedos lo que para la tradicionalmente pesimista afición mexicana eran problemas infranqueables, el idioma, el estilo y un nuevo personaje. La WWE no se metió en problemas y prácticamente calcaron el diseño de la mascara fusionada de Místico/rudo y optaron porque Sin Cara, el nuevo personaje de "Nacho" fuera "mudo". Problema resuelto.
Faltaba solo una parte para cerrar las pinzas, todo lo demás estaba resuelto, faltaba el desempeño en el ring.
En realidad las semanas, meses e incluso años posteriores a su firma con la WWE pueden resumirse en muy pocas lineas y es que, en honor a la verdad, no ha pasado nada relevante