Después de ser conocido como Pequeño Damián 666 en el Consejo Mundial de Lucha Libre, este luchador ha decidido dar un giro en su carrera y apaciguar la polémica con los derechos del nombre, por lo que ahora será conocido como Demus 3:16.
El pequeño estrella aseguró que es una persona tranquila y que no busca pleitos, por lo que ha decidido cambiarse el nombre después de algunas confrontaciones con el personaje principal Damián 666, quien ahora trabaja en la promoción de luchadores independientes 'Perros del Mal.'
"Tengo un papel de derechos firmado (nombre de Pequeño Damián 666), pero no soy alguien que busque problemas o se meta en pleitos, tengo la calidad suficiente para ser yo mismo ahora llamándome Demus 3:16, que es un demonio árabe y el número es una hora cabalística de destrucción".
Más allá de los problemas legales por el nombre, aseguró que la etapa que está por iniciar seguirá en la línea de lo que había creado antes, por lo que no se separa de la rudeza característica, incluso el nombre
"El público sabe perfectamente quién soy, están enterados de mi calidad, yo ya estoy hecho pues porque cuesta mucho más trabajo cuando se comienza desde cero, la gente ahora podrá comentar: es el Damiancito o era el Pequeño Damián pero ya me conocen".
De esta forma destacó que lo último es el nombre que use, pues su calidad en el ring la ha demostrado lucha a lucha, por lo que está seguro de seguir contando con el apoyo de la gente, como venía sucediendo.
Dijo estar muy agradecido por la historia que forjó como Pequeño Damián, porque fue como se dio a conocer, "ahora no tengo ningún problema en llamarme Pedrito Malo, pues saben quién soy".
Finalmente, dijo estar preparado para los retos que vengan e incluso dijo que si la empresa lo permite, probará suerte con los elementos tradicionales, ya que su estatura da para poder apegarse bien a esa lucha sin tanto problema, pues para el ahora Demus 3:16 es tiempo también de renovarse para llegar a una división más dinámica.
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