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El Hijo del Santo anunció el lunes que debido a una lesión cervical se retirará temporalmente, entre seis y siete meses, de la lucha profesional a fin de atenderse de este problema que afecta su salud.
El luchador explicó en conferencia de prensa que debido a esta lesión que se ubica entre la quinta y la sexta vértebra deberá someterse a una intervención quirúrgica para corregir el daño, y evitar que un golpe o cualquier tipo de impacto en la zona del cuello lo pueda dejar sin movimiento.
Agregó que esta lesión está muy cerca de dañarle de forma irreversible la médula espinal, situación que alarmó a los médicos y a él mismo, ya que las consecuencias serían muy graves, como perder la movilidad.
"Es una decisión muy importante y fuerte para mí anunciar este retiro temporal, más no definitivo, ya que primero tendré que evaluar la posibilidad de operarme y de acuerdo al resultado podré saber si continuaría con mi carrera o ya no", explicó el luchador.
Comentó que el diagnóstico que le dieron fue avalado por cinco médicos especialistas en la materia, quienes